La torre de 35 pisos en Alem y una compensación ridícula: bebederos, cestos, canteros y bicicleteros

La millonaria iniciativa es impulsada por Florencia Miconi, presidenta de Fiduciaria Paisajes Urbanos MDP, en la manzana delimitada por las calles Leandro N. Alem, Aristóbulo del Valle, Falucho y Gascón.

PRESERVAR EL PATRIMONIO. “La falta de planificación en nuestra ciudad hizo que en los últimos años creciera mucho pero de manera desordenada. Desde la visión urbanística y también turística, creemos que tenemos que preservar el patrimonio edilicio histórico e inigualable que tenemos. Frenar las excepciones desmedidas es clave en este sentido. #MarDelPlata #JuntosPorElCambio “ (Guillermo Montenegro en la red social Facebook , plena campaña electoral, 7 de agosto de 2019)

En el Concejo Deliberante, la oposición cuestionó duramente el expediente que promueve la construcción de una torre de 35 pisos en la zona de Alem y Gascón.

En ese contexto, indicaron que la iniciativa “tiene un fuerte impacto en la zona costera y en distintos barrios de Mar del Plata” y remarcaron que “es una zona que permite la construcción de inmuebles de hasta de siete metros de altura. Y el intendente quiere construir 125 metros, es decir 18 veces lo permitido. Es inadmisible que se vote eso”.

Además,  destacaron que la mencionada excepción al Código de Ordenamiento Territorial “no tiene ningún resguardo por el paisaje urbano de la ciudad”.

A continuación, consideraron que este tipo de excepciones pueden sentar un “grave precedente”, y anduvieron que “proliferen este tipo de proyectos en otros sectores de Playa Grande y Los Troncos”.

Existe una suerte de infección urbana por la sustitución de viviendas por edificios. Esto se hace sin contar con informes de impacto ambiental, ni analizar los conos de sombra. Tampoco se considera el impacto para los vecinos de la zona: servicios de cloacas, agua, estacionamiento”, sentenciaron.

DETALLES DE LA TORRE CUESTIONADA

La iniciativa es impulsada por Florencia Miconi, presidenta de Fiduciaria Paisajes Urbanos MDP, en la manzana delimitada por las calles Leandro N. Alem, Aristóbulo del Valle, Falucho y Gascón.

La propuesta incluye la preservación y restauración del “Chalet de María Frers de Mahn”, que también es de interés patrimonial, además de dos propiedades cercanas del ingeniero Alula Baldassarini, que están oficialmente declaradas como patrimoniales.

En el expediente, desde el Ejecutivo local se detalló que “del análisis de la documentación presentada permite establecer que se trata de un proyecto integrado por una torre de 35 niveles, sobre la calle Alem, y un edificio en tira de cinco niveles, sobre la calle Gascón, vinculados por un puente que los une en el quinto nivel, donde se ubican los amenities”.

A su vez, se recalca que “el proyecto evidencia la búsqueda de integración a la situación particular de conjunto patrimonial, no sólo promoviendo la preservación y la posibilidad de dar uso comunitario a los bienes patrimoniales, incorporando el espacio público mediante el ensanche de la dimensión de las aceras, la provisión de iluminación diferencial y de mobiliario urbano para uso y aprovechamiento de la comunidad”.

COMPENSACIÓN: GUSTO A MUY POCO

En la compensación urbanística, se estipula la mejora del frente costero entre las calles Aristóbulo del Valle y Roca, y en otros espacios públicos que el Departamento Ejecutivo considere necesarios.

Las compensaciones surgen por la rentabilidad que les queda a los desarrolladores cuando, por ejemplo, pueden construir más pisos de los contemplados originalmente.

En el expediente, se señala que la compensación “será dirigida prioritariamente a la puesta en valor del frente costero, en el sector comprendido entre las proyecciones de las calles Aristóbulo del Valle y Julio Argentino Roca y todo otro espacio público de la ciudad que el Departamento Ejecutivo establezca necesario para dar cumplimiento a dicha contribución”.

En ese sentido, se puntualiza que “las obras comprenden, la ejecución y recuperación de solados y veredas, muretes y cupertinas, escaleras, rampas; provisión y colocación de luminarias, equipamiento urbano (bancos, bebederos, cestos, canteros, bicicleteros), forestación y parquización, ejecución de cruces accesibles, estaciones recreativas, etc., con el propósito de garantizar valores, cualidades e identidad y así preservar el sentimiento de pertenencia y el disfrute por parte de los usuarios del sector costero”.

Tras conocida la compensación urbanística para este millonario negocio inmobiliario, las redes sociales se llenaron de cuestionamientos contra la iniciativa.

“Esto es lisa y llanamente algo que podríamos considerar una coima legal. Que porque un desarrollador arregle una plaza o ponga plata se le permita liberar alturas y demoler bienes patrimoniales no es otra cosa que poner a la venta las excepciones o que con plata se puede infringir el código. Es obsceno y criminal. Por dos pesos arruinan el espacio urbano para siempre. Y si el Concejo Deliberante avala esto (como ha venido haciéndolo) no es otra cosa que cómplice del estropicio ambiental de nuestra ciudad”, posteó el exfuncionarario radical Nino Ramella en las redes sociales.

Por su parte, el bloque de concejales de la UCR anunció que se impulsará un proyecto para poner en valor la Rambla marplatense mediante compensaciones que abonen las empresas autorizadas a realizar edificaciones por vía de excepción.

FESTIVAL DE EXCEPCIONES

A través de la plataforma Change.org, vecinos impulsan una juntada de firmas con el objetivo de rechazar “el festival de excepciones” al Código de Ordenamiento Territorial en el distrito de General Pueyrredon.

En el texto, se indica que “el festival de excepciones al código de edificación en la ciudad de Mar del Plata a costa de sus valores patrimoniales está al servicio de la especulación inmobiliaria, destruyendo no sólo el paisaje y produciendo con la liberación de alturas un impacto ambiental muy pernicioso, sino también la irreparable pérdida de lo que jamás podrá recuperarse”.

Y se remarca que “el daño no sólo lo sufren los residentes sino también quienes año a año convierten a Mar del Plata en el principal centro turístico del país”.

En ese sentido, se alerta que “los conos de sombra sobre las playas afectan el principal recurso de esta ciudad. Además, preservar el patrimonio es una responsabilidad transgeneracional”.

Hemos permanecido muchos años en silencio, sin oponernos a este atropello a nuestro hábitat. Es hora de actuar antes de que todo sea peor. Cuidar el ambiente y preservar el patrimonio no es incompatible con las inversiones y las fuentes de trabajo. Por tal motivo exigimos respeto al Código de edificación, que se elimine el ominoso sistema de ‘compensaciones’ y que las excepciones sólo puedan concederse con una mayoría calificada del Concejo Deliberante”, finaliza el texto.

MÁS CUESTIONAMIENTOS CONTRA LAS EXCEPCIONES

Por su parte, el Centro Internacional para la Conservación del Patrimonio alertó sobre “la continuidad de la normativa de excepcionalidad a cambio de compensaciones, ya que la misma fácilmente puede transformarse en una práctica que termine por ser un instrumento destinado a la especulación inmobiliaria en detrimento no solo de los bienes arquitectónicos patrimoniales, sino de la calidad ambiental y patrimonial de toda la ciudad de Mar del Plata, caracterizada como uno de los ejemplos patrimoniales arquitectónicos y urbanísticos más destacados de nuestro país; y que en las últimas décadas no solo ha ido perdiendo piezas arquitectónicas irremplazables, sino que ha visto transformarse radicalmente su paisaje urbano”.

En ese sentido, desde CICOP Argentina recomendaron que no sea aprobada la excepcionalidad y se revea esta posibilidad en futuros proyectos.

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