A pesar del tsunami de cuestionamientos que viene recibiendo el proyecto desde hace varios días por la comunidad marplatense, el oficialismo buscará avanzar este lunes en la comisión de Legislación del Concejo Deliberante con la autorización para construir una controvertida torre de 35 pisos en Alem y Gascón.
Desde la oposición vienen denunciando que se trata de “un verdadero dislate urbanístico” porque “allí donde se permite construir siete metros se van a construir 130”.
En el proyecto, promovido por la firma Paisajes Urbanos MDP de Florencia Miconi, se otorga excepciones para llevar adelante una propuesta que abarca la preservación, puesta en valor y refuncionalización del chalet de María Frers de Mahn, declarado de interés patrimonial, y de dos inmuebles con valores patrimoniales aún sin declarar que forman parte de un conjunto del ingeniero Alula Baldassarini.
Durante la pasada semana en la reunión de la comisión de Obras, el bloque de concejales de la UCR propuso un artículo para que, en compensación por los metros que construirá por encima de lo establecido en el Código de Ordenamiento Territorial, la empresa de Miconi ejecute obras de puesta en valor de la Rambla, en jurisdicción provincial.
Sin embargo, desde el gobierno de Axel Kicillof rechazaron la compensación y afirmaron que la obra de la Rambla será llevada adelante mediante una nueva licitación por la Provincia.
Mientras crece el repudio de los marplatenses ante EL millonario negocio inmobiliario, el Colegio de Arquitectos de la Provincia de Buenos Aires Distrito 9 manifestó su preocupación por la demora en el tratamiento, por parte del Honorable Concejo Deliberante, de un proyecto presentado por ésta y otras instituciones, que diera lugar a la creación del Consejo Local de Hábitat, Vivienda y Derechos del Partido de General Pueyrredon.
El Consejo Directivo recordó que junto a otras instituciones profesionales que representan a los arquitectos, los técnicos y los ingenieros, presentaron el 6 de junio de este año en el HCD un proyecto de ordenanza para la creación del referido Consejo, a través de un documento que fuera elaborado en conjunto con diversas organizaciones que lo avalaron.
Luego de su presentación, la Comisión de Obras del HCD convocó a los tres colegios promotores a desarrollar el proyecto y responder preguntas de concejales y concejalas. Sin que mediara ninguna consulta técnica a algún ente asesor, se trasladó a la sesión siguiente para que los ediles pudieran interiorizarse del proyecto. Sin embargo, desde ese día nunca se puso en tratamiento este proyecto, pese al reclamo de los involucrados.
Los Consejos locales son una herramienta de gestión y control que se desprende de la Ley Provincial 14.449 de Acceso Justo al Hábitat, al que el Municipio de General Pueyrredon adhirió en 2014 mediante la Ordenanza 22014.
El espíritu del proyecto presentado, es dotar al Concejo Deliberante, al Ejecutivo y a los habitantes de este Partido de una herramienta abierta, democrática y participativa para la gestión de la planificación y el desarrollo urbano del territorio. Ese Consejo se propone sea integrado por todas las secretarías del Ejecutivo, los colegios profesionales con incumbencias, el Obispado, la Defensoría del Pueblo, las centrales sindicales, las universidades, las ONG involucradas y el sector de los desarrolladores, actor a destacar ya que su inserción es una innovación que no incluyen los 30 Consejos conformados a lo largo y ancho de toda la Provincia, según se explicó.
Si bien las conclusiones, las propuestas y los proyectos que se desprenderían de esta herramienta no serían vinculantes por normativa, sí dejaría sentada la mirada y las valorizaciones que la ciudadanía percibe y persigue respecto a cada acción que involucrara el hábitat en General Pueyrredon como concepto general y universal de urbanidad y territorio, se resaltó.
Y se remarcó que «va de suyo que estas posiciones y definiciones estarían exentas de intereses sesgados, particulares o espurios, ya que la diversidad de sus integrantes, sumado al espíritu democrático que las conforma, las exime de toda sospecha«.
«De esta manera se canalizarían y atenderían temas neurálgicos que hoy preocupan y ocupan a la opinión pública, como las excepciones a la normativa vigente, las compensaciones que de ellas se desprenden con su justa valorización y su lógica inversión en los sectores del Partido en que sean necesarias, la preservación del patrimonio arquitectónico, la democratización del uso de los espacios públicos, la movilidad vehicular, peatonal y de ciclistas, la accesibilidad, el acceso a los servicios básicos y la urbanización de todos los barrios, el déficit de vivienda nueva y a completar o mejorar, la regulación del acceso al suelo urbano y los altos valores de loa alquileres. Todas estas cuestiones y muchas más que involucran la temática del hábitat serian abordadas por este Consejo y trasladadas a las autoridades, dotándolas de insumos acordados democrática y participativamente«, se añadió.
Y es que es imprescindible –sostiene el Colegio de Arquitectos- que “los territorios en desarrollo sean pensados y planificados con la participación de la comunidad y respetando las normas municipales, provinciales y nacionales, si como objetivo se persigue la sostenibilidad, el acuerdo y la convivencia de sus habitantes permanentes y ocasionales”.
La institución manifestó con preocupación que “hace más de 100 días que se cajonea una herramienta potente, democrática y participativa que dotaría al Ejecutivo y al Legislativo de legitimidad y transparencia en sus acciones decisorias y sus políticas públicas, en la misma Comisión donde grandes desarrollos son presentados por excepción y sin el rigor que merecería su análisis, son aprobados en forma exprés”.
Finalmente el Colegio acuerda con “la importancia que la gestión municipal le otorga al crecimiento de la construcción” y reconoce “el impulso y el riesgo que los grupos desarrolladores aportan para que esto suceda”, no obstante estar convencido de que “pensando como conducir estos emprendimientos en una planificación urbana acordada con la comunidad y pensada con sostenibilidad, se genera un virtuosismo insoslayable, se potencia la proyección económica y social de nuestro territorio e inclusive seria mayor el beneficio para quienes persiguen un fin empresarial”.
La institución concluye enfatizando que al cumplir Mar del Plata 150 años desde su fundación, “reconozcamos el tejido existente, la tradición cultural de la ciudadanía y el espacio público en el que todos los marplatenses nos podamos encontrar”.